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Estos días se celebra el debate sobre el Estado de la Ciudad.

  • Nota de prensa de la Federación Local de Asociaciones Vecinales de Leganés
  • Cuidar la ciudad para cuidar a las personas

Es un momento difícil, cuando estamos todavía inmersos en la crisis sanitaria y social, con importantes necesidades de emergencia, que exigen actuaciones rápidas para atender a la numerosa población que está pasando necesidades en estos momentos. Desde la Federación Local de Asociaciones Vecinales de Leganés ya hemos realizado distintas propuestas a este respecto, además de haber volcado nuestro trabajo solidario a través de la Red de Apoyo Mutuo y de otras acciones colaborativas.

Las prioridades de esta ciudad son las mismas desde hace mucho tiempo, las mismas que llevaron a numerosos colectivos a movilizarse en los meses previos a la pandemia. Ahora, profundizadas por la crisis, nuestras carencias se hacen más notorias y dolosas. Los últimos gobiernos locales han perdido el interés en un desarrollo social y sostenible de la ciudad, poniendo siempre la vista en el corto plazo y primando los intereses de determinados sectores de negocios, a sabiendas que asegurarse el gobierno local depende más de la política estatal que de lo que hagan en el municipio (cosas de una ciudad pseudo -dormitorio).

Y así nos va a Leganés, una ciudad epicentro del desastre del coronavirus y denominada como “corazón de piedra” en los informes de los gestores de servicios sociales por la falta de recursos existentes para los servicios y programas sociales.

Deberíamos aprender de esta crisis y ponernos manos a la obra con proyectos a medio y largo plazo para abordar las importantes necesidades de los distintos territorios de la ciudad y de las personas que aquí vivimos. Proyectos que permitan mejorar la ciudad, en cuanto al empleo, el transporte, el medioambiente, la calidad de la vivienda, la cultura, la educación…

Desde la FLAV creemos que los barrios, que son los territorios donde vivimos y donde generamos comunidad, deben ser los ejes para definir esos proyectos. Pensando en:

  • Analizar lo que ha pasado y por qué en esta ciudad ha sido más grave que en el resto. Eso nos debe llevar a realizar un diagnóstico de las infraestructuras sanitarias, de los recursos materiales y humanos. Con propuestas para que crisis sanitarias como la vivida no tengan tal impacto. Con toda seguridad más recursos sanitarios y mayor transversalidad de la sanidad pública y los servicios sociales.
  • La calidad de vida de las viviendas. Tenemos barrios con viviendas que no cumplen con muchos de los estándares de habitabilidad recogidos por ley: como accesibilidad o ahorro energético. Es imprescindible que el Ayuntamiento de Leganés desarrolle un Plan que atienda estas necesidades con recursos –propios o de otras administraciones para la rehabilitación de viviendas cumpliendo los ODS. Esas políticas además, generan empleo.
  • Los espacios e instalaciones públicas. Los barrios tienen que estar pensados como espacios para la convivencia. De ahí que en cada barrio es necesario un centro cívico, con espacios propios para la ciudadanía, y plazas y entornos que faciliten la movilidad de toda la población (con espacios accesibles, amplios, iluminados), sin dificultad y sin miedo, y que posibiliten el encuentro y el desarrollo de actividades deportivas, culturales y colaborativas entre sus gentes. Unos barrios con vida.

Con espacios donde se reste espacio al vehículo para priorizar al peatón, mediante el desarrollo de planes de movilidad urbana que primen el uso de la bici en los desplazamientos por la ciudad.

Y programas de intervención comunitaria, a través de proyectos de colaboración público-social. – Priorizar un comercio de cercanía específico en cada barrio. Desde el de la artesanía, al de los productos naturales, el de arreglo y reparaciones..-, o por qué no, el de venta de productos de la huerta local. El desarrollo de huertos productivos podría ser un mercado importante para la creación de empleo, apostando a la vez, por una economía y un consumo sostenible y circular. – En unos servicios públicos bien mantenidos por el ayuntamiento: cuidando de la recogida de residuos – con sistemas acordes a las últimas regulaciones para la sostenibilidad-, de la limpieza, del mantenimiento del mobiliario urbano. Cuidando y ampliando las zonas verdes y el arbolado. Cuidando las instalaciones públicas – colegios, instalaciones deportivas y culturales- para que, además de cumplir normas de sostenibilidad –ahorro energético- y salud –amianto-, estén acordes a las actividades que allí se realizan. – En unos servicios culturales y educativos que permitirán el desarrollo de unos vecinos y vecinas más formadas, más activas; que empoderen a las personas para que sigan alimentando la vida cultural en los barrios. – En unos servicios sociales capaces de colaborar con las familias con falta de recursos, y ayudar a la gente de la calle, a los más vulnerables, para que no quede nadie atrás…. Pero la apuesta parece ser otra: dando licencias sin ton ni son a gasolineras – pensadas para los vehículos actuales y no en los del futuro, que consumirán otra energía -, residencias para mayores, y grandes almacenes y grandes parques comerciales. Así generamos muy poco empleo y pronto tendremos la ciudad ocupada por espacios abandonados -de centros comerciales, que ya han empezado a cerrar, de gasolineras que se irán abandonando según vaya variando el modelo de transporte.

Se sigue apostando por un modelo basado en el ladrillo, se siguen privatizando servicios, mermando personal público e infrautilizando las competencias municipales. A esto contraponemos un modelo que utilice y dote al ayuntamiento de la capacidad de gestionar proyectos, de buscar recursos en otras administraciones y fortalecer los propios, organizando la plantilla municipal de forma eficiente, re municipalizando servicios perdidos y creando empresas públicas que abarquen nuevos y generen empleos suficientes y de calidad.

Necesitamos un gobierno con capacidad de gestionar, tanto el ayuntamiento, como con las organizaciones sociales. Con miras a largo plazo y un que tenga de verdad proyecto de ciudad.

Las vecinas y vecinos queremos participar de un proyecto para hacer un Leganés que ilusione, un Leganés de todas y de todos.

Dani Diaz

Fotógrafo, editor, operador de cámara. Me dedico al mundo audiovisual, trabajo como fotógrafo de eventos, books y productos. También edito y grabo vídeos. Tambien realizos paginas web y toda clase de ediciones. Contenido para youtube y programas de Tv.

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