Madrid propondrá al Gobierno ampliar a 10 el máximo de personas en las reuniones familiares en Navidad

• La Comunidad quiere también alargar media hora más el toque de queda que establece el Ejecutivo central en el borrador de medidas, hasta la 1.30

Queda un mes para Navidad y la reunión de esta tarde entre Gobierno Central y autonomías servirá para decidir unas líneas comunes a todo el territorio sobre como será. El Ejecutivo de Pedro Sánchez envió este martes un borrador a las regiones con una base sobre la que las comunidades pueden proponer cambios, y, en cualquier caso, serán estas quienes tomarán la decisión final, según confirmaron fuentes del Ejecutivo de Sánchez. Madrid acudirá al encuentro con varias modificaciones, las principales, ampliar a 10 el máximo de personas para las reuniones familiares y sociales en días seleccionados y alargar el toque de queda media hora más de lo que propone el texto inicial, hasta la una y media de la madrugada.

El documento que recibieron las consejerías de Sanidad [Propuesta de medidas de salud pública frente a la covid-19 para la celebración de las fiestas navideñas] establece como propuesta inicial un toque de queda hasta la una de la madrugada los días 24 y 31 de diciembre —una hora más del que está ahora fijado—; y mantiene la limitación para las reuniones a un máximo de seis personas tanto en los hogares como en los encuentros sociales. Recomienda evitar o minimizar las reuniones en el ámbito social (de trabajo, antiguos alumnos, clubs deportivos…). Y, “en caso de celebrarse, serán de un máximo de seis personas y preferiblemente en el exterior (al aire libre o en terrazas con máximo de dos paredes)”. Para las reuniones en el ámbito familiar “recomienda limitar la participación a los miembros que pertenezcan al mismo grupo de convivencia. En el caso de que haya algún miembro externo no conviviente habitual, las reuniones serán de hasta un máximo de seis personas”.

En ese apartado, la Comunidad de Madrid planteará ampliar el límite en el número máximo de personas que pueden reunirse y en los días en los que podrán hacerlo: “Se recomienda limitar las reuniones familiares y sociales a un máximo de tres grupos de convivientes sin sobrepasar un máximo de 10 personas para los días 24, 25 y 31 de diciembre y los días 1 y 6 de enero”. Para el resto de días, puntualiza un portavoz de la Consejería de Sanidad, “se mantiene el número máximo de seis personas”.

Ambos documentos, el del Ministerio y el del Ejecutivo de Díaz Ayuso, insisten en “las medidas de prevención” en todo momento. “Independientemente de si son familiares o no”, puntualiza el borrador del Gobierno central, “se debe garantizar las medidas de prevención (6M)”. Seis M son: mascarilla (uso de mascarilla todo el tiempo posible), manos (lavado de manos frecuente), metros (mantenimiento de la distancia física), maximizar ventilación y actividades al aire libre (mantener las ventanas y puertas abiertas en la medida en que sea seguro y factible según la temperatura), minimizar número de contactos (preferiblemente siempre los mismos) y “me quedo en casa si tengo síntomas, diagnóstico o contacto”.

Toque de queda y protocolo para residencias

En cuanto al toque de queda, el Ejecutivo de Díaz Ayuso propondrá ampliar el horario, hasta la una y media, y los días, no solo Nochebuena y Nochevieja, sino también el 25 de diciembre y el 1 de enero. Para la movilidad que pudiera producirse, sobre “medidas en la vía pública”, Madrid establecerá “colaboración con corporaciones locales para evitar aglomeraciones”.

Por último, en relación con los centros sociosanitarios (residencias de mayores, de atención a personas con discapacidad o dependientes), la Comunidad ha planificado un protocolo para permitir la salida de los residentes y que puedan “pasar vacaciones con sus familias”. Aquellos residentes con IgG positiva en los últimos seis meses o PCR positiva en los últimos tres meses, “podrán salir tanto a la salida del centro como a la entrada”, es decir, que no tendrán que hacer aislamiento ni antes de su marcha ni a su vuelta. “Los que presentan IgG negativa y no han pasado la enfermedad, “a la vuelta al centro socio-sanitario, deberán permanecer en aislamiento y se les realizará una prueba diagnóstica”. Por último, para quienes “no estén en disposición de abandonar esos centros, se facilitarán comunicaciones telemáticas”.

Fuente: El País. Link